Comentario de texto y fuente histórica en Historia de España

Comentario de fuentes históricas

El estudio de la historia se lleva a cabo mediante el análisis y el comentario de fuentes históricas. Una fuente histórica es cualquier documento que proporcione datos de una época histórica y que permita al historiador reconstruir el pasado. En la investigación histórica se debe trabajar con varias fuentes que ofrezcan puntos de vista distintos, para obtener así una visión lo más completa posible del hecho que se está estudiando.

El comentario de fuentes históricas se realiza en cuatro fases:

  1. Clasificación de la fuente
  2. Descripción de su contenido
  3. Comentario de la misma
  4. Valoración crítica

1. Clasificación de la fuente

El primer paso del comentario es clasificar la fuente. Sobre ella debemos decir: el tipo, su origen, y la fecha exacta o aproximada de elaboración. Si la fuente es una obra artística, hay que decir además su título y su autor, si se conocen.

Las fuentes históricas pueden ser de muchos tipos:

  • Escritas: literatura, prensa, diarios privados, documentos oficiales, obras históricas
  • Gráficas: gráficos, tablas
  • Cartográficas: mapas, planos, cartogramas
  • Iconográficas: cuadros, fotografías, carteles, ilustraciones
  • Audiovisuales: documentales, películas, reportajes, anuncios, música
  • Orales: entrevistas, discursos, grabaciones caseras
  • Arqueológicas: objetos, muebles, herramientas, vestidos, moneda

Respecto a su origen, las fuentes históricas son de dos tipos:

Fuentes primarias: son fuentes coetáneas al periodo histórico que se estudia o cualquier testimonio documental o artístico de una persona que ha vivido dicha época.
Fuentes secundarias: son testimonios o fuentes elaborados en una época posterior al periodo histórico estudiado, generalmente a partir de fuentes primarias.

Debemos datar la fuente si conocemos la fecha de su elaboración o publicación (o utilización). Algunos documentos como prensa, documentos oficiales o cartas suelen aparecer fechados. Es posible también que se nos dé la fecha de una fuente a la hora de realizar el ejercicio. Si no la sabemos ni se nos da, podemos intuirla aproximadamente si conocemos el periodo histórico o los acontecimientos a los que hace referencia.

Muchas obras artísticas y algunas fuentes escritas u orales pueden proporcionarnos el nombre de su autor. Si lo conocemos, es conveniente aportar un pequeño apunte sobre él a modo de aclaración (su profesión o actividad artística, cargo político o militar, o cualquier otro dato por el que se le conoce). Algunas fuentes, como las cartas, pueden aportarnos el nombre de su destinatario. Si no lo conocemos, en muchos casos es posible suponerlo por el tipo de fuente.

2. Descripción del contenido

Una vez clasificada la fuente, debemos describir su contenido. La manera de hacerlo dependerá del tipo de fuente que tengamos que comentar.

Imagen o fotografía

De una imagen o una fotografía se debe mencionar: el tema, es decir el ámbito principal con el que se relaciona su contenido: económico, político, bélico, religioso (…); después, describir su contenido desde los elementos generales a los más concretos; por último, tenemos que indicar la finalidad de la misma, la cual puede ser informativa, educativa, testimonial o propagandística, entre otras.

Gráficos u otras estadísticas

De un gráfico o una fuente estadística debemos mencionar, en primer lugar, el tipo de datos que aporta: evolución de población, aumento de precios, esperanza de vida, etcétera. Después, debemos indicar la forma de presentación de esos datos. Los gráficos suelen presentarse de tres maneras distintas: gráfico de barras, gráfico de sectores y gráfico lineal.

El siguiente paso es interpretar y explicar los datos que nos aporta el gráfico o estadística y su valor para la comprensión de una época o hecho determinados.

Mapas

Para comentar el contenido de un mapa debemos atender en primer lugar a su título y a su leyenda, que nos dará las claves para interpretarlo correctamente.

Después, debemos saber si se trata de un mapa de situación o de evolución. Los mapas de situación muestran algún dato en una época determinada (por ejemplo, un mapa de la división territorial autonómica tras la Transición). Los mapas de evolución muestran el desarrollo de un dato o un acontecimiento a través del tiempo (por ejemplo, las conquistas de territorio por un determinado país).

Con todos esos datos podemos describir el contenido del mapa siguiendo siempre algún tipo de orden. Si es un mapa de situación, mejor comenzar por lo general o lo más relevante y continuar con lo particular o accesorio. Si es un mapa de evolución, es mejor describir el contenido siguiendo un orden cronológico.

3. Comentario de la fuente

Ahora debemos relacionar el contenido de la fuente con lo que sabemos de la historia de la época o acontecimiento que esta representa. Este paso puede suponer, según la fuente en cuestión, situarla y relacionarla con el marco histórico que le corresponde; explicar, situar o identificar a los personajes, objetos, instituciones o lugares que aparecen en ella; describir los antecedentes o las consecuencias del hecho que muestra o representa la fuente.

4. Valoración crítica del texto

En la valoración crítica de la fuente, tenemos que valorar el contenido de la misma respecto a lo que sabemos del acontecimiento, del lugar, de los personajes y de la época que representa, a partir de las relaciones que hemos hecho en el punto anterior. Esta valoración consiste en juzgar la fuente, valorando la veracidad o verosimilitud de la información que nos transmite o, por último, considerando su utilidad como fuente para conocer la realidad histórica.

El comentario de fuentes en la EvAU

El comentario de una fuente histórica en el examen de Selectividad se lleva a cabo de manera muy resumida mediante dos preguntas:

1. Explique brevemente el tipo de fuente, la localización cronológica y el contenido atendiendo a la siguiente imagen. (Puntuación máxima: 0,5 puntos).

2. Relacione esta imagen con (tema histórico relacionado) (Puntuación máxima: 1 punto)

La primera pregunta se corresponde con los dos primeros pasos del comentario: la clasificación y la descripción.

La segunda pregunta se corresponde con el tercer paso: el comentario. La segunda pregunta consiste básicamente en desarrollar la teoría, pero es recomendable buscar algún punto de conexión entre la fuente y lo que estamos explicando, alguna manera de hacer mención a la fuente, para no limitarnos a escribir el contenido de memoria. Así podemos demostrar que conocemos con suficiente soltura la teoría como para poder tratarla a nuestro gusto sin plantarla en el folio de memoria.

Ambas cuestiones deben responderse de manera muy concisa, ya que se recomienda una extensión aproximada de unas quince líneas. De esas quince, se recomienda dedicar cinco a la primera pregunta y diez a la segunda. Estas recomendaciones son orientativas: no pasa nada por escribir un par de líneas más o menos, siempre que el contenido sea correcto y ajustado a lo que se pregunta.