Premiar a los buenos profesores

Premiar a los buenos docentes es la propuesta del filósofo y pedagogo José Antonio Marina tal y como explica en Libro blanco de la función docente. Según Marina, parte de la retribución del profesorado debería depender de una evaluación realizada por el centro que calificara la actividad docente. El pedagogo defiende que no sólo ha de calificarse a los alumnos sino que también a los centros y a los profesores.

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José Antonio Marina afirma que los buenos profesores no pueden cobrar lo mismo que los malos e insta a que los docentes se formen durante toda la vida. Al igual que a los médicos en España se les obliga a refrescar y actualizar los conocimientos constantemente, los profesores deberían estar obligados a mantener y a enriquecer sus conocimientos. Es imprescindible evaluar a los docentes dentro del aula, afirma Marina para así mantener una educación de calidad.

Según un informe de la OCDE sobre la función docente, los profesores españoles son los que menos controles externos pasan junto con los italianos. Un 36% de los profesores nunca ha sido sometido a una evaluación docente formal y externa. Marina reclama, por tanto, cambiar la selección y formación de los inspectores con el fin de que ayuden a los profesores a mejorar sus competencias.

Marina indica también que en general el currículo en España ha sido siempre demasiado extenso y se debería acotar y así favorecer una mejor educación. Critica además que España carece de una cultura de evaluación puesto que se ha confundido siempre con un implemento del número de exámenes.

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